El tribunal de enjuiciamiento del Consejo de la Magistratura destituyó de su cargo al juez federal de Mendoza, Walter Bento. Para la mayoría del jury, incurrió en diversas faltas que constituyen el mal desempeño de sus funciones. El ahora exmagistrado se quedó sin fueros y fue detenido ya que pesaba sobre él un pedido de prisión preventiva en la causa penal que cursa en su provincia.

Sin Bento en la sala y con un alto nivel de expectativa, el Tribunal leyó los argumentos en una audiencia que se extendió por menos de treinta minutos. Entre ellos, la compra irregular de un inmueble, anomalías en la adquisición de un crédito y maniobras para entorpecer la investigación penal en su contra.

El fallo consideró que Bento “ha incurrido en mal desempeño” y que “los motivos por los que se decide la destitución resultan verdaderamente graves”. La resolución indicó que “ninguna duda cabe que la conducta configura causal de mal desempeño” y enumeró las acusaciones que consideró probadas.

Por un lado, el jury concluyó que “quedó demostrado en forma concluyente que Bento “realizó diferentes maniobras” para interferir en la investigación judicial en su contra. El magistrado está siendo juzgado en Mendoza por los delitos de asociación ilícita y lavado de dinero, acusado, entre otras cosas, de beneficiar a narcotraficantes y contrabandistas.

Otra de las acusaciones que el Tribunal consideró probada, fue la Irregularidad en la compra de un inmueble. Según el jury, Bento compró un departamento y no declaró la transacción.

También, el Tribunal concluyó que Bento obtuvo “inescrupulosamente” un crédito hipotecario para vivienda única y le dio a la propiedad un destino distinto al debido. Además, afirmó que hubo omisiones deliberadas en sus declaraciones juradas e irregularidades en la inscripción de un concurso.

Resulta “penoso para este tribunal que un juez se haya desviado de su deber al extremo de merecer su destitución”, señaló el fallo firmado por la mayoría.

Para Bento, la causa penal y el jury constituyen una persecución política en su contra para quedarse con su cargo con competencia electoral.

Por su parte, el consejero Javier Esteban De La Fuente votó por mantener en su cargo a Bento. Con argumentos totalmente contrapuestos a los de la mayoría, consideraron que no se alcanzaron las causales de mal desempeño, que no se analizaron las pruebas y que aún no hay sentencia condenatoria en el juicio penal, por lo que destituirlo en esta instancia incurre en la violación de principio de inocencia.

Para De La Fuente la acusación no logró probar ninguna de las imputaciones. “Nos encontramos ante un juez que ha sido imputado por graves delitos, pero se ha intentado basar su mal desempeño por hechos que no constituyen mal desempeño y/o no han sido probados”, afirmó.

El consejero afirmó que es “extremo” destituirlo y que, en su lugar, debería haberse mantenido la suspensión del cargo hasta tanto se resuelva el proceso penal correspondiente.

Este último había sido uno del reclamo de Bento ante el jury, quien en sus últimas palabras le había pedido al Tribunal que “no se apure” a resolver y que aguardara el veredicto del juicio penal.

A pesar de haber sido destituido, el Jury tomó la determinación de mantener el beneficio de la obra social para uno de los hijos del ahora exjuez. Facundo Bento es discapacitado y requiere de tratamientos y terapias de por vida, que habían sido suspendidas durante este proceso.

El fallo que dejó sin fueros a Bento fue remitido al Tribunal Oral Federal 2 de Mendoza, por ello fue detenido después del proceso judicial.